dijous, 21 de juliol del 2022

Y ... LLEGÓ LA HRA

 



            La Junta Directiva de la Hermandad e Portadores de N. P. Jesús Nazareno vio prorrogado su mandato a causa de las restricciones establecidas durante la pandemia, Por ello, desaparecido este inconveniente, procedía dar cumplimiento al mandato estatutario. No obstante, la asamblea celebrada en Noviembre de 2021, ante la proximidad de la Semana Santa del 2022, decidió mantener en sus cargos a los directivos hasta una vez acabadas las celebraciones más inmediatas, de modo que se convocara de nuevo el máximo órgano de gobierno de la asociación el siguiente mes de mayo de 2022. Y así, la convocatoria se cursó en mayo y la reunión se celebró el 22 de junio pasado, siendo el asunto principal del orden del día, precisamente, la renovación de la Junta.

            Aun siendo muy exigua la asistencia, el caso es que se cumplió el encargo y, manteniéndose como se mantuvo el grueso de los directivos ya ejercientes, sí que hubo variaciones en la composición de la Directiva.

             Presentó su candidatura Dª María Luisa Ramón Pérez a la presidencia y se acogió satisfactoriamente por los concurrentes. Seguirá, pues, en la brega durante estos años en que, sucesivamente, nuestra asociación ha de ejercer, primero, la tesorería de  la Hermandad de Cofradías y, seguidamente, la secretaría. Todo saldrá adelante, si Dios quiere. Agallas, haberlas, haylas y medios humanos también.

            Por mi parte, consideré que procedía ya el relevo, porque yo, mis circunstancias y mi provecta edad, llamaban a rebato a compañeros más jóvenes y capaces. Así pues, después de celebrada la junta general y ya cesado en aquellas funciones, envié por correo electrónico a los hermanos portadores la siguiente despedida:

            “Estimados/as “nazarenos”: como sabéis, renovada la Junta Directiva, el cargo de Secretario ha recaído en el hermano portador Paco Perales, que ejercerá con la colaboración del Vice-Secretario Ximo Matéu. Ayer sábado procedimos a la entrega de los documentos propios de la secretaría y traspaso de cuantos datos y claves le va a ser imprescindible al nuevo equipo para trabajar. Por tanto, quiero aprovechar este espacio para anunciaros que he dejado ya mi tarea, tan  gratificante durante todos estos años de mi segunda etapa como secretario de la Hermandad de Portadores. Pero, sobre todo, quiero poner el máximo énfasis en el mayor de los agradecimientos a mi Vice-Secretario, que me ha prestado sus ojos en las reuniones y me ha facilitado la redacción de las actas con la aportación de sus notas y borradores. ¡Gracias, Paco! Sé que seguiremos en contacto, pero era preciso decirte públicamente que ha sido para mí una gran satisfacción contar contigo y un honor saberme sujeto activo de una amistad sincera e incondicional.

            Ni qué decir tiene cuál ha sido el placer de compartir las tareas de la Directiva con los compañeros de junta, a quienes agradezco su respeto y su demostrada empatía; y más todavía, no creo que ningún secretario haya gozado de la confianza, de la confidencialidad, de la atención y del respeto que ha tenido para conmigo la Señora Presidenta. María Luisa ha aceptado incluso mis impertinencias y las ha perdonado, y todos sabéis el aprecio que me tiene. Sabe que yo siempre estaré ahí, es decir, para aquello que fueren  necesarios mis pobres conocimientos.

            He tenido que adoptar una decisión como la que he tomado con la emoción a flor de piel, porque era hora del relevo. 

            A esta renovada Junta, como se desean los peregrinos: ¡Buen camino!

            La meta, Nuestro Padre Jesús Nazareno, es lo que cuenta, y sabemos que nosotros lo somos todo para Él.

            Con todo mi afecto,  MIGUEL MIRA MANZANARO, “Secretario emérito” ¿Vale así?