divendres, 12 d’abril del 2019

JUEVES, ONCE DE ABRIL



“EL CACHORRO”

            Desde su creación, la cofradía del Santísimo Cristo de la Expiración ha devenido en imprescindible dentro de los actos externos de la Semana Santa de Xàtiva. Y así se comprobó anoche, jueves 11 de abril. Si estos días pasados la expectación en los distintos traslados ya celebrados fue insignificante, ayer, antes de salir la  procesión, ya era numerosa la gente que la esperaba en las aceras de la calle de la Reina y en la Alameda. De otra parte, no vi nada que merezca comentarios, porque todo se desarrolló dentro de la normalidad. Si acaso, referir que noté una mejora en la banda de cornetas y tambores, al incluirse en el metal una trompetas de pistones, como las que se tocan en las bandas de música, que dieron una sonoridad menos estridente y más afinada a la banda y permitieron solos que con la corneta no son tan melodiosos. Todo es perfectible, pero me gustó. Vi también varios penitentes con vestas de color distinto, que imagino serían representación de alguna cofradía invitada.
            Limitada asistencia de acompañantes de particular; y, eso sí, no entiendo por qué no se ha de corregir la dichos costumbre de desfilar unos pegados a otros como si no hubiera espacio para caminar a cierta distancia con sobriedad y elegancia. Tal vez ese modo de ser resulte incorregible; y lo digo por propia experiencia.
            Hoy, Viernes de Dolores, si dios quiere, saldrá a la calle la pequeña pero hermosa Piedad, aquí llamada Virgen Dolorosa, en esta preciada tregua de la meteorología.
            Al mencionar a la Madre de Dios en su dolor, me viene al paso un vehemente ruego a María Santísima:
            Convierte, Madre, nuestro corazón y nuestra embotada mente en un pasar de lo superficial a la íntima búsqueda de tu misericordia, de vuestra piedad amorosa, vuestro Hijo en brazos, para que nuestra fe no se quede a medio camino, un camino que puede ser bello, pero que al paso de una débil tormenta se convierte en pedregal.
            Santísimo Cristo de la Expiración, ten misericordia de nosotros.

            Saludos, amigos. Miguel Mira